Precisamente lo que me decantó por este motor es que era un motor potente sin necesidad de turbo. Por supuesto el empuje del turbo gusta mucho, no lo dudo y lo quisiera, pero no a costa de acortar la vida útil del motor, de más piezas móviles, por tanto más averías, y cosas por el estilo. Motor que responde por si mismo sin presiones externas. Es como si vas en caballo y le vas fustigando todo el tiempo para que rinda al máximo. Para una carrera vale, pero para usarlo todos los días para ir al pueblo, no pega. El caballo te lo agradecerá.
y tienes que cuidar de 194.
y tienes que cuidar de 194.
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